Harding, Mason

Mason Harding era un genio de la electrónica y el mayor neuro científico del planeta, sin embargo su vida dio un vuelco cuando a su hija Carol le fue diagnosticada una grave enfermedad que necesitaba un tratamiento muy caro, para colmo, Harding fue despedido de su trabajo en Dynamic Electronics lo que le llevó, desesperado por obtener dinero para pagar el tratamiento de su hija, a aceptar la oferta de William Taurey, líder de la Elite, para que trabajara para ellos.

Taurey le dotó de un sueldo excelente y un laboratorio de alta tecnología, además, instaló a Carol en una cómoda casa donde recibía cuidados y tratamientos, pudiendo Harding visitarla periódicamente siempre bajo grandes medidas de seguridad.

Durante dos años Harding trabajó para la Elite fabricando un arma sónica que afectaba al cerebro, se trataba de la Bomba Loca capaz de sumir a sus víctimas en un estado de locura homicida, el plan de la Fuerzas Realistas de América era detonar esta bomba en una gran ciudad y sembrar el caos como antesala de su ataque para hacerse con el poder, al principio le ofrecieron un puesto a Harding en el nuevo orden pero a medida que se acercaba la fecha de la detonación, Mason vio como la vigilancia sobre él se estrechaba y solo mediante amenazas le dejaban salir para ir a visitar a su hija.

Mientras, los planes de la Fuerza Nacional fueron descubiertos por SHIELD que envió al Capitán América y al Halcón a infiltrarse en las instalaciones subterráneas de la organización, estos lograron desmantelar las instalaciones pero no lograron localizar la bomba ni a Harding ya que Taurey y los suyos habían logrado escapar antes de su llegada con la bomba, y Harding se encontraba en ese momento visitando a su hija.

Trasladado a la nueva ubicación de la Fuerza Nacional, Mason supo que las autoridades habían localizado a su hija y habían invadido la casa, sin duda esperaban que el neuro científico regresara a ver a Carol pero Taurey estaba dispuesto a lanzar un ataque contra la casa para acabar con los allí presentes sin importarle que eso significara la muerte de la chica. Mason intentó oponerse al plan pero fue encerrado en una celda pero esto no detuvo a Harding que uso una versión en miniatura de la bomba para volver locos a sus guardianes, mientras que él permanecía inmune gracias a un aparato que le protegía, con sus guardias peleando entre sí, Harding logró escapar y marchar en busca de su hija la cual había sido trasladada a un hospital, pero allí encontró al Capitán América al cual informó del paradero de la Bomba al tiempo que le daba el artefacto que le protegería de sus efectos.

Con estos datos, el vengador de la estrella, acompañado por el Halcón y agentes de SHIELD irrumpieron en la base de la Elite a tiempo de destruir la Bomba salvando la nación, Harding por su parte fue encerrado en una cárcel federal por su colaboración en el plan, aunque se tuvo en cuenta como atenuante que había actuado bajo coacción.

Mas adelante, el Capi visitó a Harding en prisión ya que intentaba desenterrar los recuerdos de su pasado los cuales permanecían ocultos en el fondo de su mente, el vengador esperaba que Mason, como experto neuro científico, pudiera ayudarle y el doctor le habló sobre una sonda en la que había estado trabajando y que tal vez pudiera ayudarlo. El Capi movió hilos para que soltaran a Harding y este terminó la sonda y se dispuso a ayudar al Capi. La sonda sacó a la luz los secretos del pasado de Steve Rogers (en aquel momento no sabían que esos recuerdos habían sido implantados y eran falsos), pero además, interactuó con la química de su cuerpo provocando que volviera al estado físico que había recordado, antes de someterse al suero del supersoldado.

No se han vuelto a tener noticias de Mason Harding desde entonces.