Hassab de Irabia

Hassab era el monarca regente de Irabia, un pequeño pero poderoso país rico en petróleo y de religión islamista que en cierto momento, marchó a los USA donde realizó una gira por el medio oeste americano que incluía visitas a las localidades de Ashville y Clifton. Prevenidos de la presencia de una figura tan importante, las autoridades y el servicio secreto dispusieron todo lo necesario para escoltar al monarca, el cual contaba también con su propia escolta de modo que su seguridad parecía garantizada.

Sin embargo, la presencia de Hassab no pasó desapercibida para el villano nazi conocido como el Cráneo Rojo, el cual planeó asesinar al monarca con el objetivo de iniciar una guerra entre Irabia y el resto de países islámicos que le apoyaban y los USA, un conflicto que el villano esperaba que debilitara lo suficiente a ambos países permitiendo su fácil conquista.

Para ello, el villano nazi había orquestado un plan, que desviaría a la comitiva de Hassab, que tenía que dirigirse a Ashville donde le esperaban las autoridades, hasta el pueblo de Clifton, pueblo donde sería mas fácil capturar al monarca. Sin embargo, cuando el Cráneo Rojo que su archienemigo, el Capitán América, estaba en las proximidades, alteró el plan en un intento de acabar también con su odiado rival, de modo que maquinó para que el Capi se dirigiera también hacia Clifton.

Desprevenido sobre el peligro que corría, Hassab llegó a Clifton junto a su comitiva, donde fueron atacados por los esbirros del Cráneo Rojo, que a bordo de un helicóptero modificado, lograron capturar el vehículo donde viajaba el monarca, con el propio Hassab a bordo. El Capi fue testigo del secuestro aunque fue incapaz de evitarlo, si pudo seguir el rastro de los secuestradores sin embargo, lo que le condujo a un refugio en las montañas donde el Cráneo Rojo contaba con un cohete espacial, que usaría para enviar a sus víctimas al espacio donde morirían definitivamente.

Comenzó una lucha entre el Capi y los esbirros del villano nazi, mientras este intentaba llevar a Hassab a bordo del cohete, el monarca sin embargo, al ver como el aventurero occidental arriesgaba su vida para salvarle, decidió no permanecer impasible y logró liberarse de su captor, el héroe de la estrella por su parte, logró alcanzar el cohete y tras ardua lucha, introdujo a Cráneo en el cohete saltando al exterior antes que el vehículo espacial marchara al espacio, salvando de este modo la vida del rey de Irabia. Es de suponer que Hassab regresaría a su reino puesto que no han vuelto a tenerse noticias suyas.