Hanson, Ken

Kenneth Hanson era un antiguo mercenario y ex soldado del ejército de los Estados Unidos llegando a combatir en Vietnam, lugar donde coincidió con el acaudalado Samson Scythe. Tras acabar la guerra, Hanson tuvo problemas para adaptarse a la vida civil, sin trabajo y necesitado de dinero, acudió a su antiguo compañero en busca de un préstamo, pero en lugar de ello, Scythe le ofreció un puesto de trabajo como su mayordomo.

El acuerdo funcionó a la perfección, Hanson desarrolló sus tareas con pericia y se entendía magníficamente con Samson pese a la rara afición del adinerado personaje, que no era otra que disfrutar siendo testigo de la muerte de otras personas. Viendo el tedio que acosaba a su jefe, Hanson fue clave en volver a avivar la afición de Scythe por presenciar muertes en directo, y para ello contrató a un pistolero y ambos marcharon a Central Park en busca de algún delincuente. No tardaron mucho en encontrarse frente a uno y mientras Hanson tomaba testimonio gráfico de todo con una cámara, el pistolero disparaba al criminal causando su muerte, las imágenes de todo esto llegaron en directo a Scythe que volvió a sentir una emoción que no sentía desde la guerra, por lo que decidió usar su fortuna para revivir este tipo de emociones una y otra vez, por lo que reunió a toda una serie de espías y operativos que estaban bajo las órdenes de Hanson y que solo tenían un objetivo, matar para disfrute de su jefe.

De este modo, incontables criminales, maleantes y delincuentes murieron a manos de Hanson y sus hombres, todos para el disfrute de Scythe que presenciaba en directo gracias a las cámaras las muertes y asesinatos. En cierto momento, el criminal conocido como Constrictor secuestró un barco de la guardia costera fuertemente armado y amenazó con bombardear Nueva York si la ciudad no accedía a pagar un rescate, horrorizado por el número de muertes que podía causar y sobre todo porque no podría ver morir a todas las víctimas en lugar de si muriesen una a una, Scythe envió a Hanson y sus hombres para que abortaran la amenaza de Cosntrictor.

El villano ofidio se enfrentó al Capitán América que había acudido en respusta a la amenaza sobre la ciudad, pero en medio de la batalla, Constrictor ordenó a sus hombres que abrieran fuego con el cañón del barco, pero ya entonces Hanson había saboteado la embarcación que saltó por los aires evitando la destrucción de Nueva York.

En cierto momento, Hanson y sus hombres empezaron a acabar con la vida de miembros de dos bandas rivales como eran las de Carlo Ferrini y Sean Gamble. Ambos mafiosos, al saber de las muertes de sus hombres, acusaron a la banda rival lo que llevó a Nueva York al borde de una guerra de bandas. Sabiendo que dicha guerra de bandas provocaría un aumento de las muertes entre criminales y una mayor posibilidad de verlas en directo, Scythe ordenó a Hanson que provocara la muerte de uno de los líderes mafiosos, siendo Carlo Ferrini el elegido. Hanson logró infiltrarse en el restaurante en el cual Ferrini se disponía a celebrar su cumpleaños, camuflando una batería en el interior de la comida la cual el mafioso se disponía a tomar, en el momento en que pinchó el pollo con los cubiertos, Ferrini se vio sometido a una potente descarga eléctrica que lo electrocutó provocando su muerte.

La muerte de Ferrini provocó que sus seguidores buscaran venganza y juraran vengarse de Gamble, el cual, como primer sospechoso, se apresuró a acudir a la policía para desmarcarse de cualquier implicación en el asesinato. El Capitán América, preocupado por una posible guerra de bandas y temiendo por que Gamble fuera la siguiente víctima, decició seguir al criminal para sorprender a su posible asesino, y aunque logró salvar al mafioso de la trampa que Hanson había colocado en el ascensor de su casa, no pudo capturar al asesino que estaba a salvo a cientos de metros del lugar.

Sin embargo, Scythe había presenciado toda la escena a través de las cámaras situadas en el hueco del ascensor y una nueva emoción recorrió su cuerpo, si lograba excitarse viendo la muerte de criminales, se preguntó como sería presenciar la muerte de un héroe de modo que envió a Hanson y sus hombres a atracar un banco con la esperanza de atraer al Capi, el cual fue conducido por los criminales en fuga hasta una trampa donde el aventurero se encontró frente a Scythe, el cual le retó a que lo capturara en la finca que tenía en Edgewood.

El Capitán América respondió al reto, marchando a la finca de Scythe donde hubo de hacer frente a mil y una trampas urdidas por Hanson, como lasers, sabuesos robóticos, ataques sónicos..... todo ello presenciado por Scythe y por Hanson el cual, a diferencia de su jefe, estaba preocupado por si el Capi lograba alcanzar el centro de mando. Los temores de Kenneth demostraron ser completamente fundados puesto que el Capi logró superar las trampas y alcanzar el lugar donde se hallaban los criminales. Sin embargo el mayordomo estaba preparado para esta eventualidad y empuñaba un lanzallamas con el que atacó al aventurero, que si bien pudo esquivar las llamas y lanzar su escudo, no alcanzó a Hanson sino al tanque de combustible de su arma provocando un incendio que hizo arder el lugar.

El Capi pudo sacar a Hanson del lugar antes que le alcanzaran las llamas pero no así a Samson que terminó muriendo abarasado. Acabada la batalla, el Capi entregó a Ken Hanson a las autoridades tras lo cual no han vuelto a tenerse noticias suyas.