Senyaka

No están claros cuales son los orígenes del cruel mutante conocido como Senyaka, ni cuales fueron sus motivaciones para unirse a los Acólitos de Magneto, pero lo más probable es que a pedido de Fabián Cortez lo haya hecho con el fin de saciar su sed de sangre. Ya en el grupo manifestó sus tendencias psicópatas al participar de la masacre que realizaron los acólitos en el Hospicio de Santa Ana. Allí Senyaka no dudo en utilizar su látigo energético para ahorcar y torturar a una de las enfermeras del hospicio, quien sobreviviría terriblemente desfigurada solo para informar a Valerie Cooper y a Mercurio (que en ese momento formaba parte del Factor-X) las acciones de los Acólitos.

Cuando Factor-X partió hacia una de las bases del gobierno de los Estados Unidos, fueron emboscados por los Acólitos de Magneto y en ese grupo se encontraba Senyaka. Sin embargo el grupo se retiró, ya que el objetivo de Cortez era el de revelar a Factor-X la existencia del Proyecto Despertar que planeaba utilizar centinelas en caso de una guerra abierta contra los mutantes.

Cuando regreso Magneto al lado de su emisario Éxodo, Senyaka lo acompañó a la tierra al igual que todos sus Acólitos durante el funeral de Magik, la hermana de Coloso, allí Magneto les ofreció a todos los equipos X presentes unirse a él o morir enfrentándolo, como una muestra de su poderío ejecutó delante de todos a Senyaka ahorcándolo con sus propio látigo quizás como castigo debido a que no se hizo Acólito por creer en los ideales de Magneto sino debido a por una simple justificación para asesinar.

Recientemente, Senyaka fue resucitado como parte del plan urdido por Selene y Eli Bard, que resucitaron a mutantes que atacaron a la Patrulla X durante la crisis conocida como Necrosha. Enfrentado a Lobezno y a X-23, Senyaka volvió a morir cuando los dos mutantes lo decapitaron.