Caballero Negro I

Después de que su tío, Nathan Garret, asumiese una identidad malvada del Caballero Negro (y muriese con ella), Dane Whitman, último descendiente del Caballero Negro original de los tiempos de Camelot, asumió el manto de su antepasado. Tras ello, colaboró con los Vengadores brevemente.

Poco después descubriría la espada de ébano de su antecesor, que se convertiría en su principal arma. Tras ello, uniría sus fuerzas con los Vengadores y el Doctor Extraño, en una feroz lucha contra los dioses asgardianos Surtur e Ymir. Después, Dane seguiría con su carrera heroica junto a los Vengadores, los Defensores e incluso en solitario.

Durante un tiempo, y debido a la venganza de la hechicera asgardiana conocida como la Encantadora, su cuerpo fue convertido en piedra, y su alma enviada al pasado, de vuelta al cuerpo de su antepasado. Tras su regreso, continuó colaborando con sus compañeros Vengadores. Tras la mutación del mundo, Dane se pondría al servicio del Rey Britania, formando parte de la nueva formación de Excalibur, destinada a la defensa del reino de Britania. Sin embargo, durante una batalla con la Gárgola Gris, ésta transformó a todo el grupo en piedra, incluido Whitman.

En un arranque de ira, el Rey Britania mató a la Gárgola, condenando a sus amigos a una eternidad en forma de piedra. De nada sirvió el traer Gárgolas Grises de otras realidades alternativas. Sin embargo, años después, Mefisto, tomando la forma de la Capitana U.K. y otra Gárgola Gris, liberó a Excalibur de su petrea prisión, para ganarse la confianza del Rey.

Una vez liberado, Dane continuó al servicio de Britania, pero no pudo evitar la repentina invasión del castillo del Rey por parte de los Desviantes, y fue capturado con el resto de defensores de Britania. Tras el fin del conflicto, es de suponer que Whitman siguió cumpliendo sus obligaciones como defensor del reino.