Tao

Shang-Chi era el hijo de Fu-Manchú, el poderoso criminal internacional. Creció y se educó en el retiro de Fu Manchú en Honan, China, teniendo poco contacto con sus padres. A la edad de 19 años ya era un maestro en artes marciales y mentales, en las que había sido educado por su padre y sus instructores.

A esa edad de 19 años, su padre le envió al mundo exterior por primera vez, con la misión de asesinar al Dr. Petrie, un viejo enemigo de Fu-Manchú, convencido de que su padre era un bienhechor y Petrie, un villano. Shang-Chi penetró en la casa londinense de Petrie y le golpeó hasta matarlo. Pero ese "Petrie" no era más que un androide construido por el propio Fu-Manchú.

Sir Denis Nayland Smith, el mayor adversario de Fu-Manchú, descubrió a Shang-Chi e intentó matarlo, pero le salvó su dominio del kung fu. Chi admitió ser hijo de Fu-Manchú y Smith le descubrió la verdad acerca de la carrera criminal de su padre. Chi visitó a su madre, que le confirmó las palabras de Smith.

Tras esto, Shang-Chi fue a la base de operaciones de su padre, oculta en un edificio de oficinas neoyorquino, y se declaró enemigo mortal de Fu-Manchú. Durante varios años, Shang-Chi dedicó su tiempo a derribar el imperio criminal de su padre y otras amenazas para la sociedad occidental. Se convirtió en aliado de sir Denis Nayland Smith y colaboró en diversas misiones con el MI-6 británico.

El "elixir vitae" de Fu-Manchú, que le había permitido conservar su vida y aspecto físico joven durante muchas décadas, ya no le bastaba. Ahora el criminal necesitaba la sangre de Shang-Chi para conservar su vitalidad física, pero Chi se apoderó del tubo de ensayo que contenía su sangre y lo derramó en el suelo.

Cuando su refugio estalló, gracias a la acción de otros aliados de Smith, Fu-Manchú se hallaba en él. Shang-Chi logró escapar, suponiendo que su padre había muerto. Culpándose de haber colaborado en la aparente muerte de su padre, Chi vagabundeó durante varias semanas pensando en su futuro.

Al final, decidió apartarse de lo que llamaba "juegos de engaño y muerte" en los que había participado como aventurero, y se retiró al poblado de Yang Yin, en la provincia china de Kwang-Tung, pasando la mayor parte del tiempo como pescador. Sin embargo, en diversas ocasiones regresó a su vida aventurera, aliándose a otros héroes para detener amenazas superhumanas.

Tras la mutación del mundo, Chi abandonó su rostro tras una máscara con el símbolo del taijitu, asumiendo la identidad de Tao (que significa noble camino de conducta, entre otras cosas). Así, renunció al legado malvado de su padre Fu-Manchú y se entregó aún más al bien formando parte de Xen, el superequipo japonés dirigido por Lord Fuego Solar, hijo del Fuego Solar original.

Junto a Xen, se enfrentó a amenazas como el ejército de Cráneo y el Tong de Creel. Posteriormente viajaría junto a todo Xen, el Doctor Extraño, Thor y Loki a Asgard, para liberar a Clea, una misión que resultaría exitosa regresando a la Tierra, siendo que la última vez que se le vio actuó para derrotar al resucitado Fin Fang Foom tras lo cual no se han vuelto a tener conocimientos de sus actividades.