Criaturas del Lago

Se ignora el verdadero nombre de la raza extraterrestre que fundó la ciudad de Chimu, los athosianos se referían a ellos simplemente como las Criaturas del Lago en referencia al lugar en el que moraban. Este pueblo de seres acuáticos era natural de un planeta cuya estrella se estaba volviendo fría con el paso del tiempo; sabiendo que iban a morir si se quedaban en su mundo, decidieron emigrar hacia las estrellas. Así fue como la nave cayó en la Tierra. Al descubrir que no podían respirar el aire terrestre, decidieron penetrar en los cuerpos de la fauna autóctona de la región. Cada uno de los extraterrestres tomó posesión del animal que más gracia les hacía. Con sus nuevos cuerpos y su conocimiento antiguo construyeron el reino de Chimu en las profundidades del lago en el que habían caído. Muchos de ellos empezaron a aparearse y nacieron una generación de seres extraños. Para muchos de ellos la sangre se convirtió en su comida y bebida. Si no podía obtenerla de ningún otro lugar no dudaban en atacar a sus propios congeneres {RS 4-FB}.

Algunos habitantes de Athos descubrieron la existencia de Chimu y de su triste destino. Debido a que su líder los había abandonado y estaban bajo la débil guía de Cyphax, los athosianos consiguieron esclavizarlos para que participaran en las macabras representaciones del Teatro de los Monstruos. Allí los deprabados habitantes de la ciudad daban rienda suelta a sus más bajos instintos viendo como las Criaturas del Lago se mataban entre ellos en el escenario {RS 4-FB-BTS}.

Por casualidad, Red Sonja descubrió la existencia de las Criaturas del Lago e intentó salvarlas de su esclavitud. La mujer se ofreció para liberar a su antiguo líder, Orubu, pero encontró en cambio a un sacerdote enloquecido que se había desligado completamente del destino de su pueblo {RS 5}.

Se ignora la suerte que corrieron las Criaturas del Lago, pero es muy posible que terminaran extinguiéndose debido a la sed de sangre que corría por sus venas.