Caldros

Caldros era el leal comandante de los soldados de Feema, la gobernante de la ciudad de Alwazar. Siguiendo sus órdenes dirigió la partida de caza y captura que encontró y mató al renegado Byratus. El comandante también fue el encargado de pactar un tratado de paz con el ejército del General Lassusar, quien estaba a punto de sitiar la ciudad. Durante su visita a su campamento supo que Lassusa buscaba a Red Sonja por haberlo mutilado años atrás. Caldros sabía que Red Sonja se encontraba en la corte de Feema e informó inmediatamente del descubrimiento, quien pensó que podría hacer buen uso de su nueva recluta. Red Sonja, sin embargo, estaba espiando la conversación e intentó fugarse con Galon, uno de los prisioneros de las mazmorras y hermano de Byratus. Feema la descubrió y la retó a un duelo que perdió. Al ver como su señora moría y el sacerdote Achmal escogía como nuevo señor de la ciudad a Galon, Caldros decidió marcharse de Alwazar e informar a Lassusar de la presencia de Red Sonja en ella {RS3 2}.

Las tropas del General sitiaron durante meses Alwazar, ya que su odio hacia Red Sonja era tal que era capaz de destruir toda la ciudad con tal de terminar con su vida. Al ver que el combate se alargaba más de lo esperado, Lassusar decidió tender una trampa a Red Sonja. Aunque logró capturarla, la mujer logró escapar con la ayuda de Achmal. Sin poder demorar más su partida y ahora que Red Sonja ya no se encontraba en la ciudad, Lassusar ordenó a Caldros que continuara el asedio. El día en que las puertas de Alwazar cedieron al ataque, la mercenaria pelirroja llegó con quinientos hombres de Calum-Barai en su auxilio. Red Sonja no tardó en encontrar a Caldros y terminar con su vida de una vez para todas {RS3 3}.