Berserker

Hace miles de años, el hombre que mas tarde sería conocido como el Berserker, formaba parte de una primitiva partida de caza, que penetró en territorio de una tribu rival en busca de alimento, y acabó enzarzado en una brutal batalla a muerte contra sus enemigos, batalla que acabó con la muerte de todos sus compañeros. El Berserker huyó de sus enemigos y para ocultarse de sus perseguidores se escondió en la llamada Cueva de Paredes Brillantes, de la cual se decía que todos los que habían entrado en ella, nunca habían escapado. El guerrero estuvo a punto de morir debido a la radiación que emitía la cueva, pero no sucumbió, sino que siguió avanzando hasta llegar al final de la cueva, cayendo al exterior.

No murió el guerrero, sino que al despertar descubrió que era mas fuerte que nunca, no era este el único efecto secundario de su estancia en la cueva, ahora se veía dominado por una irresistible furia asesina. En este estado atacó a sus perseguidores acabando con ellos, no contento con esto llegó al campamento de la tribu rival y acabó con todos ellos, pero la furia continuaba. Pasaron años y el guerrero no envejecía (otro de los efectos de la cueva), pero su rabia asesina continuaba, e hizo del matar su diversión.

Sus habilidades llamaron la atención de un noble sumerio, que le ofreció formar parte de su guardia privada ofreciéndole un encargo, asesinar al gobernante de la ciudad.

El Berserker no solía confiar en nadie, pero aquel noble sumerio le ofrecía un objetivo, un objetivo que además le atraía, un asesinato. El Berserker mató al noble y cobró por ello, había encontrado una nueva ocupación, la de asesino a sueldo.

Durante años, vagabundeó alquilando su espada a quien pagara mejor, al servicio de los faraones creó un imperio a orillas del Nilo, y años mas tarde fueron los persas quienes alquilaron sus servicios, a estos siguieron los macedonios de Alejandro Magno que extendió su imperio hasta el Indo, y solamente la muerte del gran Alejandro impidió que junto al Berserker conquistara el mundo.

Mientras, la sangrienta reputación del guerrero había sobrepasado las fronteras de la Tierra, sus servicios fueron requeridos por civilizaciones de otros mundos, una vez superado el miedo ante nuevas razas, el Berserker descubrió que matar alienígenas le gustaba tanto como matar humanos, el destino de planetas enteros estaba en sus manos, y a cambio de sus servicios, los alienígenas le dieron armas especiales que le hacían un guerrero aun mas temible.

La vuelta del Berserker a la Tierra, se produjo cuando una nueva civilización comenzaba a florecer, se trataba del Imperio romano. El Berserker se unió a las Legiones Romanas, y suyo era el poder para dominar el planeta entero.

Esto era algo que otra raza, los Señores de la Tierra, no podían permitir, los Señores de la Tierra. Estos pertenecían a una raza que, tras siglos de estudio, habían conseguido controlar las fuerzas de la naturaleza, y que vieron como la presencia del Berserker amenazaba con destruir el equilibrio que tanto habían luchado por mantener.

Los Señores de la Tierra decidieron acabar con el Berserker, tras varios intentos fallidos, los Señores de la Tierra lograron provocar la erupción del Vesubio, sabiendo que el Guerrero Eterno estaba en su falda. Sin embargo, ni sumergido en lava murió el Berserker, aunque fue atrapado por toneladas de lava quedando atrapado.

La erupción del Vesubio provocó una reacción en cadena, que provocó la destrucción de Pompeya y otras ciudades, cientos de inocentes murieron . Esto fue una tragedia para los Señores de la Tierra, que decidieron disolver su sociedad, dispersándose por el mundo y olvidando todos sus conocimientos. Lograron descubrir el Berserker estaba únicamente atrapado en la lava, y decidieron dejar tras de si a uno de los suyos, el Señor de las Sombras, para detener al Berserker en caso que este se liberara.

Pasaron siglos sin noticias del Berserker, hasta que ya en nuestros tiempos, una expedición arqueológica comenzó excavar en las ruinas de Pompeya, amenazando con liberar al Berserker. Ante esta amenaza, el Señor de las Sombras regresó de su exilio en otra dimensión, dispuesto a detener al guerrero.

La aparición del Señor de la Sombras y su ciudadela llamó la atención de las autoridades, que avisaron a los Vengadores que marcharon a la Isla y allí combatieron al Señor de las Sombras, e inadvertidamente, lo hirieron de muerte. El Señor de las Sombras les habló de la existencia del Berserker y su amenaza para todo el planeta, y finalmente falleció, no sin antes entregar a los Vengadores un amuleto que debería servirles para derrotar al guerrero, aunque desgraciadamente murió antes de poder explicar su funcionamiento.

En otro punto del planeta, el Berserker escapaba finalmente de su prisión tras cientos de años de encierro, y tras recuperar sus armas, se dispuso a sembrar el caos en el planeta. Los Vengadores llegaron a Italia, dispuestos a enfrentarse al Berserker, pero ni los héroes mas poderosos de la Tierra pudieron derrotar al Guerrero Eterno, que los venció y encerró en una cárcel de llamas, tras esto marchó del lugar, dispuesto a vender sus servicios a cualquiera que los alquilara en esta época.

Los Vengadores escaparon de la prisión de llamas, y siguieron al guerrero allá donde se encontrara, en un dramático combate final, los héroes fueron nuevamente derrotados, solamente el Hombre Maravilla, que portaba el amuleto, quedó en pie.

El Hombre Maravilla logró activar el amuleto, que exilió al Berserker hasta el mundo de las sombras, una vez allí, el Hombre Maravilla destruyó el amuleto, de modo que el Berserker quedó encerrado de por vida.