Mundo Fantasma

Mundo Fantasma es el hogar de los Fantasmas del Espacio, una rama desviante de los Skrulls. Este planeta se encuentra en la Nebulosa Oscura y orbita un Sol Negro con el cual establece un nexo místico del que extraen su magia.

Una raza expansionista, bélica y racista los Fantasmas esclavizaron a decenas de planetas en la Nebulosa Oscura, que fueron usados como mano de obra para construir ingenios de guerra y naves para ampliar sus conquistas.

Hace 200 años, los Fantasmas vieron como la Nebulosa Oscura era visitada por una delegación del planeta Galador, que fue exterminada sin piedad, tras esto, los Fantasmas enviaron una flota en dirección al planeta de Galador para destruir el planeta y exterminar o esclavizar a sus habitantes. Sin embargo en Galador, prevenidos del ataque tras la destrucción de su delegación habían creado a los Caballeros del Espacio que se opusieron a los Fantasmas obligándoles a huir, sin embargo en su camino hacia Galador diezmaron decenas de planetas asesinando a miles de galadorianos.

El más grande de los Caballeros del Espacio, Rom, no estaba dispuesto a permitir que los Fantasmas escaparan después de la muerte y destrucción que habían causado y los persiguió en su retirada, tras diezmar decenas de naves, la flota Fantasma se dispersó por el espacio, en una decisión crucial para su futuro, Rom dejó escapar a las naves, que aterrizaron en decenas de mundos propagando la amenaza Fantasma entre otros planetas en la Tierra y persiguió a la nave insignia que se internó en la Nebulosa Oscura buscando la seguridad del Mundo Fantasma.

Sin pensar en el peligro que corría, Rom siguió a los Fantasmas hasta el Mundo Fantasma, atravesando las nubes de ácido que orbitaban el planeta y alcanzó a la nave insignia cuando apenas les quedaban unos pocos metros para refugiarse en la Fortaleza, derribándolo en el aire y destruyéndolo.

No contento con ello, Rom hizo frente a las defensas mágicas y tecnológicas de la Fortaleza atravesándolas, y acabando con miles de los Fantasmas hasta que en un desesperado último intento, las hechiceras Fantasmas crearon una ilusión a los ojos de Rom que pensó que era atacado por monstruos Fantasmas, permitiéndoles escapar.

Los Fantasmas del Espacio habían visto como su número había sido dramáticamente reducido tanto en la batalla contra los galadorianos como con la visita de Rom, además su flota se había dispersado por la galaxia y los Fantasmas que quedaban en Planeta Fantasma decidieron abandonar el planeta, dejando tras de si multitud de encantamientos para impedir que fuera ocupado.

Posteriormente el Mundo Fantasma fue visitado por una partida de Caballeros del Espacio, que buscaban rescatar a Rom, tras hacer frente a multitud de peligros como la fauna local compuesta por una especie de lobos, insectos asesinos o pajarracos generadores de energía o el propio planeta, que se hundía a su paso o intentaba atraparlos en garras de piedra.

Finalmente los Caballeros del Espacio superaron encontraron a Rom tras acabar con los constructor elementales creados mágicamente por los Fantasmas en unas grutas subterráneas, y con su ayuda lograron superar el encantamiento y juntos marcharse del Mundo Fantasma que quedó deshabitado.

Sin embargo, pese a estar abandonado, el Mundo Fantasma seguía proporcionando a los Fantasmas su magia arcana, aumentando en intensidad cuanto mas cerca estaban de él.

Para intentar acabar con el Mundo Fantasma, Rom aprovechó un enfrentamiento contra Galactus, el Devorador de Mundos, para conducirlo a la Nebulosa Oscura y ofrecerle el Mundo Fantasma para que lo consumiera.

Sin embargo, el Mundo Fantasma se negaba a ser destruido, la lluvia ácida destruyó las máquinas de Galactus e incluso comenzaron a quemar al propio Devorador, cuando este intentó destruirlo con rayos de anti materia, el planeta contratacó causándole un dolor inaguantable.

Finalmente, Galactus comprendió que era el Sol Negro quien proporcionaba al planeta su energía, y marchó a la atmósfera dispuesto a destruirlo, sin embargo el Sol Negro se defendió generando docenas de monstruos que obligaron al Devorador a huir para no ser destruido.

Los Fantasmas por su parte, veían como poco a poco perdían su guerra contra Rom y sus aliados y urdieron un desesperado intento de ganar la guerra, uniéndose las magas para crear el hechizo de Fusión Mundial que transformaría el Sol de la Tierra en un Sol Oscuro como el que le daba poder a los Fantasmas atrayendo el Mundo Fantasma desde la Nebulosa Oscura fundiéndolo con la Tierra.

En los días previos a que se completara la Fusión, los Fantasmas lanzaron un ataque masivo contra pueblos y ciudades y los terrestres tuvieron que movilizar a sus ejércitos y recursos superhumanos para hacer frente a la amenaza.

Finalmente el mutante Forja creó un duplicado a gran escala del Neutralizador de Rom que alimentado por el verdadero Neutralizador logró aislar el Sol Negro respecto del Mundo Fantasma antes que se produjera la Fusión Mundial privando a los Fantasmas de su poder tras lo cual el Mundo Fantasma fue expulsado al Limbo con los miles de Fantasmas que todavía quedaban en su interior.

Durante décadas, la Reina de los Fantasmas llamada Volks, que había quedado atrás en la Tierra, debido a su enlace mental con su raza, recibió las súplicas de sus congéneres en que suplicaban que las liberara de su encierro. Estos lamentos por parte de sus súbditos provocaron que la reina enloqueciera. No fue hasta que un Skrull logró convocar a Dredd, el hechicero mas poderoso con que contaban los Fantasmas del Espacio (y que había muerto combatiendo a Rom años atrás) y obtener sus conocimientos que la esperanza de los Fantasmas del Espacio de escapar de su exilio renacieron.

Copiando el aspecto del hechicero, el Skrull contactó con Volks y ambos trazaron un plan, sugestionando a Brandy (esposa del desaparecido Rom y reina de Galador), de modo que el Sol Negro fue rescatado de la Nébula Oscura donde fue enviado durante la batalla por la Tierra, y comenzó a fusionarlo con el sol de Galador como antesala de la vuelta de los Fantasmas del Espacio.

Los planes fueron descubiertos por los Aniquiladores, una congregación de algunos de los héroes cósmicos mas poderosos de la galaxia entre los que se encontraban Estela Plateada, Ronan o Quasar, que lograron descubrir los planes de Volks a la que lograron derrotar, pero durante la batalla descubrieron el triste destino de los Fantasmas y dejándose llevar por la compasión, decidieron ayudar a dicha raza a salir de su exilio.

De este modo, los héroes cósmicos penetraron en el Limbo acompañados de Volks y una vez allí marcharon al Mundo Fantasma, donde fueron testigos del triste destino de los Fantasmas, puesto que la antaño orgullosa raza se había convertido en un cúmulo de miembros marchitos y ajados que solo podían esperar a la muerte. Allí, Volks intentó alzar a su pueblo y hacerlo resurgir de sus cenizas pero se encontró con que los Fantasmas, tras años de sufrimiento, no estaban dispuestos a luchar por alguien a la que culpaban de su estado y se volvieron contra ella, que tuvo que ser protegida por los héroes. Sin embargo la breve lucha solo fue la antesala de otra mayor puesto que Inmortus, tras detectar la llegada de extraños a su reino, envió a Tempus y un ejército de sus leales siervos sacados de todas las líneas temporales para atacar a los recién llegados, por fortuna, Quasar logró llegar a un acuerdo con el Señor del Limbo el cual, gracias a sus conocimientos sobre el tiempo sabía del destino cósmico que aguardaba al terrestre y no deseando que este fuera dañado en su lucha, accedió a retirar a sus tropas.

Los héroes cósmicos se dispusieron a sacar al Mundo Fantasma del Limbo pero tuvieron que hacer frente a la última acometida del Skrull que mostró sus verdaderos planes, desintegrar a los Fantasmas a sus átomos mas básicos para obtener el material genético necesario para crear una nueva raza de Skrulls, aunque eso supusiera el fin de los Fantasmas como especie.

Los héroes cósmicos intentaron detenerlo de manera infructuosa sin embargo Volks se sacrificó por su pueblo y aunque le costó la vida, logró detener al Skrull liberando a su pueblo. Ya sin interferencias, los héroes cósmicos se dispusieron a sacar al Mundo Fantasma del Limbo, aunque para ello hubieron de fusionar el Sol Negro con el Sol de Galador, de modo que la mitad del Sol Negro bañaría el Mundo Fantasma mientras que el sol de Galador alimentaría el mundo natal de los Caballeros del Espacio que se encontraba en la órbita opuesta.

Tras abandonar el Limbo y de nuevo en su hogar, los Fantasmas recuperaron su poder y fuerza, pero dada su nueva condición de vecinos de los Galadorianos, no dudaron en firmar la paz con sus ancestrales enemigos de modo que la milenaria guerra entre el Mundo Fantasma y Galador llegó a su fin.