Arnés

Erika Benson era la madre de Gilbert Benson, el mutante conocido como Fragmentos con la capacidad de absorber diferentes frecuencias de energía y almacenarlas dentro de su cuerpo. Arnés, como mercenaria mutante con armadura, fue por IMA para viajar por todo el mundo utilizando a su propio hijo para absorber la dispersa energía de Proteus, el hijo fallecido de la genetista Moira MacTaggert que poseía el poder de manipular la realidad. Durante la tarea insultaba cruelmente y maltrataba a Fragmentos.

Absorbiendo la energía, Fragmentos fue aumentando más y más de peso hasta llegar a tener el aspecto de un monstruoso obeso de más de 300 kilos. El equipo de mutantes de los Nuevos Mutantes, acompañados de los Nuevos Guerreros y el grupo de mutantes reunidos por Moira en la Isla Muir intentaron hacer todo lo posible por desviar la energía luchando contra Arnés pero fracasaron. Finalmente, el cuerpo de Gilbert no pudo aguantar tanta energía al excederse en sus capacidades y explotó. Pero Fragmentos no murió, sino que su consciencia se fusionó con la del Proteo recién reformado.

La amalgama de Kevin/Gilbert (Proteo/Fragmentos) también capturó a las madres de ambos en una realidad alternativa creada matemáticamente y las mantuvo cautivas. Erika persuadía a su hijo para que matara a los héroes mutantes que las intentaban rescatar hasta que finalmente Moira, Marvel Boy, Jean Grey y Siryn convencieron al nuevo ser de que en este mundo no encontraría la felicidad y que la única escapatoria sería la dispersión de sus energías llevando a ambos al olvido. Tras la muerte de su hijo, Arnés fue detenida.