Tierra-Presidente Thor

Intentando impedir que su mejor amigo, Ben Grimm, se transformase en la Cosa, Reed Richards regresó en el tiempo para arreglar el accidente de teletransportación que les concedió los poderes y les transformó en los 4 Fantásticos. Teniendo éxito, la tecnología teletransportadora les permitió entrar en contacto con los skrulls, una raza alienígena que les concedió unas píldoras milagrosas que curaban todas las enfermedades y concedían superpoderes a cada persona.

En dos años, la Tierra se vio gobernada por Thor, como presidente mundial en un planeta de superhumanos, a excepción de Ben Grimm, que rehusó el tratamiento skrull. El mundo era casi una utopía, a excepción de una minoría de supervillanos (apenas 5000 en todo el mundo), como el Doctor Muerte, quien intentaba utilizar la máquina del tiempo de Reed para evitar el actual estado del mundo (sin duda para dominarlo él mismo).

No obstante, el regalo skrull demostró ser una trampa cuando estos regresaron a la Tierra y activaron un programa que provocó la muerte de todos aquellos que se habían tomado el tratamiento; todos excepto Ben. Sin embargo, esta circunstancia le permitió derrotar al anciano Súper-Skrull (cuya armadura de combate obtenía sus poderes de los superhumanos circundantes), y con ella utilizar la máquina del tiempo para sabotear nuevamente el experimento de teletransporte original.

Tras esto (y dado que los skrull destruían en el futuro el laboratorio que potenciaba el viaje en el tiempo), Grimm se perdería en el tiempo 500 años atrás, donde sería enterrado en una pirámide precolombina ritual, debido a su armadura extraterrestre. No obstante, y aunque sus acciones no impidieron el desastre causado en la Tierra-20604, si permitió que la Tierra antes de la distorsión temporal (la Tierra-1610) permaneciese indemne y sin cambio.