Ranaq

Ranaq es una de las Grandes Bestias, unas criaturas místicas de increíble poder que viven en una dimensión de bolsillo adyacente a la Tierra desde la cual pueden acceder por medios místicos a la Tierra, a este reino extradimensional se le llama Reino de las Bestias. Ranaq es una de las Bestias más poderosas, sin embargo tiene una debilidad que no tienen sus compañeros, para existir en este plano de la realidad, necesita un huésped humano.

Hace millones de años, Ranaq y el resto de las Bestias asolaron su propia dimensión, acabando con todo rastro de vida, asi, los millones de almas de los habitantes originales de aquella dimensión quedaron atrapados en el Reino de las Bestias. Buscando extender sus conquistas, las Bestias llegaron a la Tierra dispuestos a someterla.

Ranaq y las demás Bestias intentaron atacar la Tierra en al menos tres ocasiones pero fueron rechazadas por los Dioses del Norte de Canadá, entre los que se encontraban Hodiak y su hija Nelvanna, que crearon una barrera mística detrás de las cuales quedaron encerradas las Grandes Bestias, desgraciadamente, los Dioses del Norte quedaron atrapados también en su reino tras la barrera.

Hace un siglo, Ranaq el Devorador fue invocado por dos humanos, Zebediah Chase y Lucas Strang que obligaron a un nativo a abrir la barrera dimensional para convocar a una de las Bestias, obligándole a hacer su voluntad. Ranaq fue convocado, y de inmediato intentó matar a los dos humanos, fallando, al estar protegidos por amuletos mágicos, Chase ordenó a Ranaq que les diera riquezas y mujeres, y Ranaq, aprovechó la codicia de Chase para engañarle, le dijo que no podría disfrutar de las riquezas y mujeres ya que eran fruto de la magia, y con los amuletos no podría tocarlos. Chase se quitó los amuletos, y Ranaq lo mató poseyéndolo. Dotado de un huesped humano, Ranaq podía campar a sus anchas, pero entonces Stang disparó a Chase (ahora convertido en el huesped humano de Ranaq) matándo el cuerpo, obligando a Ranaq a retirarse. Sin embago, al hacerlo una maldición cayó sobre Strang, maldición que indicaba que Lucas viviría una vida larga pero solitaria, y que después de 100 años, Ranaq volvería para acosarlo.

Las restantes Grandes Bestias quedaron encerradas tras la barrera durante cientos de años, pero en años recientes, las barreras místicas quedaron debilitadas y los Dioses del Norte, viendo que el peligro que corría la Tierra, pero siendo incapaces de acudir en persona para defenderla, hubieron de idear otro sistema. Los Dioses del Norte usaron a un humano llamado Richard Easton, con el cual yació Nelvanna, para que se gestara una nueva vida en forma de Narya, la semidiosa también conocida como Ave Nevada que mas tarde se uniría al grupo canadiense del Alpha Flight, la cual nació con la mision de combatir a las Grandes Bestias si estas aparecian en la Tierra.

Finamente, un siglo después de la muerte de Chase, un extremadamente anciano Lucas Strang vio como Ranaq comenzaba a manifestarse, la biznieta de Strang, Emily, se puso en contacto con Shaman y su hija Elizabeth, los cuales acudieron a casa de Strang justo en el momento en que Ranaq volvía a aparecer en este plano astral y combatía a Shaman y su hija. Desgraciadamente para la Bestia, Elizabeth descubrió entonces que era la elegida para convertirse en Talisman, siendo mas poderosa incluso que Shaman, Talismán derrotó a Ranaq al que expulso de este plano. Tras esto ambos, padre e hija junto a Ave Nevada y Puck marcharon al pasado donde presenciaron la muerte de Chase y el inicio de la maldición de Strang, descubriendo el origen de la bestia. Ranaq quedó atrapado de nuevo en el Reino de las Bestias, y solo volvio a la Tierra en contadas ocasiones, como fue convocado por la entidad malévola conocida como Podredumbre, que era capaz de controlar a las Grandes Bestias, pero cuando Shaman asumió la identidad de Talismán, usó su habilidad para controlar a los espíritus, para devolver a Ranaq y al resto de las Grandes Bestias de vuelta a su reino.

Cuando Walter Langwosky (ahora con el cuerpo de mujer y adoptando el nombre de Wanda) volvió a la vida, recuperando el cuerpo de Sasquatch, Ranaq y las Grandes Bestias volvieron a intentar despertar a su compañero Tanaraq para que tomara el control del cuerpo de Langkowsky, aunque fracasaron en su intento de corromperle primero en el Polo Norte y cuando mas adelante probaron

otro intento por corromper a Wanda, este acabó también en fracaso para Ranaq y los suyos.

En cierto momento, las Grandes Bestias sintieron que una amenaza se cernía sobre su reino y otros reinos místicos, se trataba de la amenaza del dios Mikaboshi, embarcado en una cruzada que le conducía a destruir toda vida en el Universo y en cualquier dimensión, amenazando incluso a las Grandes Bestias. Ranaq y los suyos convocaron a Sasquatch al que ofrecieron un trato, ellos resucitarían y dotarían de poder a Alpha Flight (cuyos miembros habían fallecido combatiendo a Michael Pointer) si a cambio los héroes canadienses aceptaban luchar contra Mikaboshi para defenderles. Ranaq y sus compañeros afirmaron que en caso de negarse, devolverían a los héroes resucitados de vuelto al reino de los muertos.

Deseoso por reunirse con sus amigos, Langkowski aceptó el trato que le ofrecían Ranaq y el resto de las Grandes Bestias pero Shaman le convenció que no podían hacerse tratos con criaturas tan malvadas como Mikaboshi, y Sasquatch rompió el trato aunque sabía que eso significaba la muerte de sus amigos. Irónicamente, la amenaza de las Grandes Bestias era un farol ya que carecían de poder para devolver a Alpha Flight de vuelta al reino de los muertos ya que este había sido invadido por Mikaboshi y ya no existían reglas que mantuvieran allí a los muertos.

Poco mas adelante, uno de los compañeros de Ranaq, Tanaraq, obtuvo un enorme poder después que una plaga del Wendigo se desatara sobre tierras canadienses. Con poderes inmensos como nunca antes había tenido, Tanaraq invadió el reino de los espíritus pero se negó a ayudar a sus compañeros a escapar de su encierro en el Reino de las Bestias e incluso los encadenó y mantuvo como sus prisioneros.

Furiosos con su compañero, Ranaq y el resto de las Grandes Bestias aceptaron unir fuerzas con la Patrulla X y con Alpha Flight a los que dotaron de poder suficiente para que invadieran el Reino de los Espíritus y pusieran fin a la plaga del Wendigo con lo que privaron de poder a Tanaraq que fue devuelto al Reino de las Bestias mientras que Ranaq y los suyos eran liberados, siendo que no han vuelto a tenerse noticias suyas desde entonces.