Guerra de Reyes

La guerra de Reyes fue un conflicto que enfrentó a dos de los mayores imperios galácticos existentes, el Imperio Shi'ar y el Imperio Kree. Aunque estos dos imperios habían combatido anteriormente en una guerra que acabó con la derrota de los Kree y su casi total extinción al estallar una nega bomba en el corazón de su Imperio, años después la situación había cambiado radicalmente. Los Kree habían perdido a su líder histórico, la Inteligencia Suprema, actualmente estaban dirigidos por Ronan el Acusador que regía el destino de los Kree después que estos se vieran azotados por dos crisis galácticas de enormes proporciones. En la primera, fueron duramente castigados por la invasión dirigida por Annihilus y sus ejércitos de la Zona Negativa, fue la Guerra de Aniquilación y en ella murieron millones de seres antes que la amenaza fuera contenida. Los Kree, cuyas fuerzas formaban el grueso del Frente Unido que se opusieron a las fuerzas de Annihilus, tuvieron miles de muertos y su imperio quedó fraccionado, ocupado por el lugarteniente del fallecido Annihilus, Voraz, en lo que se dio a conocer como los Territorios Cedidos.

Todavía no se habían repuesto de la Guerra de Aniquilación cuando Ronan y los Kree sufrieron la invasión de la raza conocida como la Falange, que aislaron al Imperio Kree del resto de Universo y controlaron a los Kree como antesala de su expansión por el resto de la Galaxia. Ronan, ayudado por algunos de sus antiguos aliados junto a los que había combatido durante la Guerra de Aniquilación, logró derrotar a la Falange acabando con su líder, Ultron, y dejando inerte a la Falange liberando el Imperio Kree. Tras dos guerras de enorme magnitud, el Imperio Kree estaba muy debilitado por lo que utilizaron una de las armas dejadas atrás por la Falange, la cual era capaz de crear un campo de fuerza casi impenetrable, para proteger a los Kree mientras se recuperaban.

Su aislamiento se rompió en pocas ocasiones, en una de ellas, los Inhumanos, que antaño fueron creados por los Kree como sus fuerzas de élite para su guerra contra los Skrulls, llegaron a Kree Lar y solicitar ayuda a Ronan y los suyos para enfrentarse a los Skrulls, que planeaban conquistar la Tierra y habían secuestrado a Rayo Negro, el monarca de los Inhumanos. Ronan aceptó ayudar a los Inhumanos a derrotar a los Skrulls y liberar a Rayo Negro pero exigió una contraprestación para sellar la alianza entre Krees e Inhumanos, pidió la mano de Cristal, miembro de la Familia Real y segunda en la línea de sucesión. Los Inhumanos lograron rescatar a Rayo Negro y tras derrotar a los Skrulls, el monarca de la Familia Real decidió que la etapa de aislamiento de su pueblo había terminado y era tiempo de tomar una política mas agresiva. Por ello, los Inhumanos usaron la maquinaria fabricada por Maximus el Loco para hacer que su hogar, Attilan, abandonara la Luna donde había estado estacionada los últimos años y se dirigiera hacia el espacio.

Los Inhumanos dieron caza a los restos de la flota Skrull que huían tras su derrota en la Tierra, y usando la voz de su monarca, enfocada por un arma creada por Maximus, el Ecodensador, destruyeron a la flota Skrull. Solo una nave escapó a la matanza inicial, siendo perseguida por los Inhumanos a bordo de su ciudad volante, la nave fugitiva Skrull entró en el espacio Shi'ar y tres naves del Imperio de las aves se dirigieron a interceptarlos. Pese a las súplicas de su cuñada Cristal, Rayo Negro no estaba dispuesto a dejar escapar a ningún Skrull y usó el Ecodensador para destruir no solo a los Skrulls sino también a las naves Shi'ar.

Tras acabar con los Skrulls, los Inhumanos marcharon en dirección a Hala, donde lograron atravesar el escudo que protegía al Imperio Kree. La Familia Real se internó en el mundo trono Kree armados con armaduras de eco, que condensaban el poder sónico de Rayo Negro. Con ellos atravesaron las filas de los Kree como si fueran mantequilla y llegaron hasta Ronan, al que desarmaron y obligaron a escuchar su oferta, permitir que la Familia Real dirigiera el destino de los Kree para llevarles al paso siguiente de la evolución. Ronan, que nunca había querido gobernar a los Kree y solo lo había hecho empujado por las circunstancias, creyó en los Inhumanos y en su promesa de llevar a su pueblo mas allá del estancamiento genético en que se encontraban, por lo que en nombre de los Kree aceptó a los Inhumanos y a su rey Rayo Negro, como nuevo monarca de los Kree.

Los Shi'ar por su parte, también tenían un nuevo majestor, se trataba del terrestre conocido como Vulcano, que se había desposado con Ave de Muerte, había expulsado del trono a Lilandra y había asesinado a D'Ken. Vulcano tuvo que hacer frente a una guerra civil contra una parte del imperio que lo detestaba por no ser un Shi'ar y pretendían la vuelta de Lilandra, así, mientras Vulcano contaba con el apoyo de la Guardia Imperial Shi'ar y con casi toda la flota, Lilandra contaba con el apoyo de los Saqueadores Estelares, a los que se habían unido recientemente tres miembros de la Patrulla X (entre ellos Rachel Grey, Polaris y Alex Summers, sobrina, cuñada y hermano de Vulcano respectivamente) y un número cada vez mayor de disidentes del ejército, entre los que se encontraba el influyente Almirante Ka'ardum. Finalmente Vulcano logró prevalecer al hacer comprender a Ka'ardum y las fuerzas rebeldes que llevaría al Imperio Shi'ar a una senda de conquista y grandeza. Lilandra, tras perder la guerra civil, escapó con Rachel y Korvus mientras el resto de los Saqueadores Estelares habían sido capturados y encerrados en un mundo prisión, Kr'Kn. Vulcano comenzó su política de expansión, combatiendo contra imperios vecinos a los que conquistó con facilidad como fue el caso de los Z'nox, cuando los miembros del Consejo Galáctico acudieron a pedirle explicaciones, Vulcano los ejecutó en un claro mensaje al Consejo, no iba a permitir que nadie se interpusiera en sus planes para el Imperio Shi'ar.

Pero los pensamientos del majestor estaban divididos en otros dos frentes, torturar a su hermanos Alex en su prisión de Kr'Kn, y la molestia constante que suponían Lilandra y sus aliados. Como la Guardia Imperial era necesaria en el frente para mantener el esfuerzo bélico, Vulcano decidió crear una nueva Guardia Imperial, formada por criminales y asesinos que languidecían en las mazmorras de Chandilar, esta nueva Guardia Imperial la formaban Xenith la Strontiana, el último superviviente de la raza de los Descreados, un simbionte, el desconocido Pn'Zo y un Hodinn, tan loco como su antecesor en la Guardia Imperial creada por Cassandra Nova. Esta nueva Guardia Imperial localizó a Lilandra y sus aliados en los Mundos de El Puño, se produjo un enfrentamiento y la ex Majestrix y los suyos apenas si pudieron escapar mientras detrás suyo, el Hodinn desataba su poder destruyendo los Mundos del Puño y con ellos a millones de personas. En su huida, Lilandra y los suyos descubrieron donde estaban prisioneros sus compañeros de los Saqueadores Estelares y marcharon hacia Kr'Kn. Allí, Kaos había escapado de su encierro y liberado a sus compañeros pero en lugar de escapar se dispusieron a esperar a Vulcano para combatir en la batalla final. La llegada de Lilandra y los suyos se produjo solo segundos antes de la llegada de la Nueva Guardia Imperial, se desató una lucha entre ambos grupos que fue interrumpida con la llegada de Vulcano y su Guardia Imperial. Superados en número, los Saqueadores Estelares escaparon de Kr'Kn para frustración de Vulcano.

Decidido a continuar sus planes de expansión, pero más decidido que nunca a exterminar a Lilandra y a su hermano, dividió sus fuerzas. El mismo dirigiría la caza de Lilandra y los Saqueadores Estelares mientras que Xenith se unía a Ka'ardum para liderar la expansión. Por que Vulcano había vislumbrado una gran oportunidad en el ataque de los Inhumanos a sus naves en la frontera. Con este ataque, Vulcano y los suyos tenían una excusa para declarar la guerra a los Kree, el pequeño de los Summers estaba convencido que sus enemigos estaban demasiado debilitados tras la guerra contra Annihilus y la Falange y que era una oportunidad única para hacerse con los enormes territorios del Imperio Kree.

Lilandra también vio en el inminente estallido de las hostilidades entre los Kree y los Shi'ar una oportunidad pero por razones diferentes a las de Vulcano. Haciendo bueno el dicho que los enemigos de mis enemigos son mis amigos, Lilandra marchó al espacio Kree para acudir a la boda real que iba a celebrarse entre Ronan y Cristal, a fin de recabar la ayuda de los Inhumanos para oponerse a Vulcano. La Familia Real aceptó dar a Lilandra asilo temporal durante el tiempo que durara la boda. El enlace, que se iba a orquestar en el glacial Gon-Ket, fue interrumpido por la llegada de una partida de miembros de la Guardia Imperial, liderados por Gladiador que destruyó el artefacto que generaba el campo que protegía el espacio Kree. Los Inhumanos, los Saqueadores Estelares y Ronan combatieron valientemente contra la Guardia Imperial pero fueron abruptamente derrotados y no pudieron evitar que los guerreros Shi'ar se llevaran a Lilandra. Mientras, en el espacio, Vulcano dirigía a la flota Shi'ar contra los mundos exteriores del Imperio Kree a los que sometían con tropas terrestres, con ataques aéreos o mediante el uso masivo de Negabombas. Pero Vulcano había cometido un error, el ataque de sus fuerzas se limitó a capturar a Lilandra cuando tendría que haber lanzado un golpe decapitador y acabar con Rayo Negro cuando tuvo ocasión. Por que ahora los Inhumanos juraron vengarse de los Shi'ar por un ataque tan cobarde.

Así, los Inhumanos dirigieron a los Kree en un contrataque contra las fuerzas Shi'ar a las que lograron detener en sus incursiones contra sus territorios, mientras, Cristal se convirtió en una especie de “princesa del pueblo” para los Kree debido a su preocupación por los padecimientos de Ronan y su pueblo. Los Saqueadores Estelares por su parte, partieron hacia los territorios Shi'ar con el objetivo de liberar a Lilandra mientras la guerra seguía por toda la frontera. La guerra entre Kree y Shi'ar había llamado la atención de gente poderosa por toda la galaxia, los Guardianes de la Galaxia, cuya base se encontraba en Sapiencial en el borde del Universo, se dividieron en dos grupos, que fueron enviados a los imperios Kree y Shi'ar para reunirse con Rayo Negro y con Vulcano para intentar que detuvieran la guerra ya que esta amenazaba con romper el tejido de la realidad y destruir el Universo. Sin embargo, ninguno de los dos grupos tuvo éxito en su misión, los Guardianes de la Galaxia enviados a parlamentar con los Inhumanos se encontraron con la negativa de Rayo Negro a detener la guerra. Tal vez hubieran podido llegar a un entendimiento pero Martir, una de los miembros del grupos, perdió la paciencia y cogió a Cristal como rehén, curiosamente, Cristal era la miembro de los Inhumanos mas propensa a escuchar a los Guardianes de la Galaxia y cuando Phyla la secuestró, perdieron cualquier oportunidad de detener la guerra. Visto que su misión había fracasado, el grupo regresó a Sapiencial pero Phyla desobedeció una vez mas las órdenes y se llevó a Cristal como rehén. El grupo que había marchado a hablar con Vulcano tuvo menos suerte todavía, la nave estelar donde se encontrado el majestor estaba protegido contra aparatos teleportadores y los miembros de la Guardianes quedaron flotando en el vacío fuera de la nave. Afortunadamente, fueron recogidos por la nave de los Saqueadores Estelares que seguían a la flota Shi'ar, los Saqueadores rescataron a los Guardianes de la Galaxia y escaparon de la Flota.

No todos los Guardianes de la Galaxia habían sido expulsados de la nave, Adam Warlock, cuyo poder provenía de la magia, pudo saltarse los escudos de protección contra aparatos teleportadores y entró en la nave de Vulcano. El Majestor no quiso ni escuchar las advertencias de Vulcano y ambos se enzarzaron en combate personal.Superado ampliamente en poder, Warlock apenas si pudo escapar de la nave pero no antes que una de las miembros de la Guardia Imperial, Magique, pudo ponerle un rastreador místico que condujo a la Guardia Imperial hasta Sapiencial. Los Guardianes de la Galaxia (menos el grupo que se había unido a los Saqueadores Estelares) regresaron a Sapiencial, solo segundos antes de la llegada de sendas partidas enviadas por los Inhumanos y los Shi'ar. Comenzó un combate a tres bandas que se redujo a un combate entre los Guardianes de la Galaxia y los Shi'ar después que los Inhumanos se marcharan después de rescatar a Cristal. Pese a estar ampliamente superados en número, los Guardianes de la Galaxia derrotaron a los Shi'ar a los que obligaron a huir de Sapiencial. Mientras, los Saqueadores Estelares, reforzados por un contingente de Guardianes de la Galaxia, atacaron la nave estelar donde Lilandra estaba retenida. La custodiaban un pequeño ejército de soldados Shi'ar además de un contingente de miembros de la Guardia Imperial encabezados por Gladiador.

Comezó entonces una lucha entre los Shi'ar y los Saqueadores Estelares y sus aliados. La batalla se decantaba por parte de los rebeldes pero la intervención de Gladiador amenazaba con volver las tornas de la batalla justo cuando habían logrado liberar a Lilandra. Sin embargo, en el último momento, Gladiador cambió de bando, prefiriendo unir fuerzas con Lilandra antes que continuar apoyando a un loco como Vulcano. Con el apoyo de Gladiador, los Saqueadores Estelares se dispusieron a llevar a Lilandra hasta Chandilar para que recuperara el trono mientras los Guardianes de la Galaxia regresaban a Sapiencial. Nada de esto sabía Vulcano, demasiado absorto en una política cada vez mas agresiva, que incluían entre otras cosas, la invasión de los Territorios Cedidos enfrentándose a Voraz y sus huestes de la Zona Negativa.

Otros que habían visto en la guerra entre los Kree y los Shi'ar una amenaza para el Universo fueron el Cuerpo Nova. El Cuerpo tal y como había sido conocido durante años fue destruido en los albores de la Guerra de Aniquilación y solamente quedó con vida el terrano Richard Rider, el cual contenía en su interior todo el poder de la Fuerza Nova y era aconsejado por la Mundo Mente. Sin embargo la Mundo Mente buscaba reconstituir el Cuerpo y, después de fusionarse con Ego para crear una nueva Xandar, enloqueció. En este estado la Mundo Mente comenzó a reclutar voluntarios para el nuevo Cuerpo Nova, dado que estaba en la Tierra, a los primeros reclutas procedentes de otros planetas (entre ellos un Shi'ar) se unió un enorme contingente de terranos, entre ellos el hermano de Richard. Cuando Rider se opuso a los planes de la Mundo Mente, esta le arrebató los poderse y a continuación marchó en dirección al espacio junto a todos sus reclutas, para intentar detener la guerra. La Mundo Mente envió a sus reclutas, la mayoría de ellos todavía novatos, a enfrentarse a las tropas Shi'ar, desgraciadamente, si bien el Cuerpo Nova era capaz de enfrentarse a los ejércitos Shi'ar fueron incapaces de hacer frente a la Guardia Imperial que derrotó a los nuevos reclutas en una batalla en el planeta Nil-Rast. El líder de la Guardia Imperial, Gladiador, se llevó a Tarcel ante Vulcano mientras el resto de la Guardia Imperial regresaba al frente, dejando a la Nueva Guardia Imperial al cargo de los prisioneros. La líder de la nueva Guardia, Xenith, distaba mucho de contemplar las leyes de la guerra respecto al trato a los prisioneros y no tardó en ejecutar a los prisioneros. El joven Rider se dedicó entonces a perseguir a Xenith acusándola de crímenes de guerra.

El curso de la guerra amenazaba con acabar con el Imperio Shi'ar, el coste de la guerra era enorme, los mundos conquistados se revelaban, los mundos Shi'ar se revelaban por la excesivas cargas que les provocaba la guerra y tanto los Kree liderados por los Inhumanos y las fuerzas de Voraz presentaban una resistencia feroz, fue por ello que se produjo el resurgir de la Fraternidad de las Aves Rapaces, una fraternidad que estaba dedicada a mantener la expansión y prosperidad del Imperio. Antaño una orden poderosa, en la actualidad solo contaban con un miembro, Zarpa, pero que demostró ser muy capaz. Buscando devolver a la vida a más de los suyos, Zarpa viajó a la Tierra donde un miembro de la Fraternidad vivía, se trataba de Darkhawk que se había hecho con uno de los amuletos de la Fraternidad y lograba controlarlo manteniendo su personalidad. Zarpa le engañó para forzar al límite sus capacidades permitiendo al miembro de la Fraternidad tomar el control sobre Halcón Oscuro con el nombre de Cuchilla. Acompañado de su nuevo compañero, Zarpa forjó un pacto con Blastaar, nuevo monarca de la Zona Negativa, para que se lanzara contra las tropas de Voraz en los Territorios Cedidos. Después, se presentó ante Vulcano al que ofreció la ayuda de la Fraternidad, le aconsejó que detuviera la expansión y le alertó de la huida de Lilandra. El pequeño de los Summers se dispuso a viajar a Chandilar para evitar el intento de la antigua majestrix de apoderarse del trono, pero Zarpa había previsto tal eventualidad y había enviado a Cuchilla a Chandilar, donde Lilandra había conseguido el apoyo del Parlamento y se disponía a renovar sus votos, condición indispensable para volver a ocupar el trono. En su camino al Templo de Sharra y Ky'Thri, lugar donde debían renovarse los votos, Lilandra fue acompañada de Gladiador y los Saqueadores Estelares, que hubieron de proteger a Lilandra de las iras de la población, la mitad de la cual apoyaba a Vulcano. Dado que un gran número de Shi'ar detestaba al terrestre, se produjeron disturbios y peleas y el estado de guerra agravó con la llegada de los Comandos de la Muerte Shi'ar que se enfrentaron a los Saqueadores Estelares y a Gladiador. Aprovechando el desconcierto, Cuchilla logró acercarse a Lilandra lo suficiente para asesinarla, acabando así con la mayor oportunidad de poner fin a la guerra pacíficamente.

Cuando los Inhumanos supieron de la muerte de Lilandra y con ella la última oportunidad de acabar con Vulcano y detener la guerra, decidieron llevar a cabo su plan de contingencia, el lanzamiento de la Bomba T que bombardearía el cosmos con las Nieblas Terrígenas convirtiendo a todos los habitantes en Inhumanos, poniendo fin a las guerras entre razas ya que todos serían la misma. Cuando Vulcano supo que los Inhumanos se lanzaban a la batalla, desoyó la órdenes de Zarpa de detener la guerra contra los Kree y se puso al mando de la Flota para interceptar a sus enemigos. Zarpa marchó a intentar detenerle ya que creía que Vulcano no era el líder adecuado para los Shi'ar, y buscó la ayuda de Cuchilla, lo que desconocía era que Christopher había logrado imponer su voluntad y volver a controlar su cuerpo, se produjo un enfrentamiento entre ambos y Zarpa pareció morir mientras que Christopher hubo de huir ya que era buscado por toda la galaxia acusado de haber matado a Lilandra.

Mientras en Chandilar cundía el caos, con salvajes enfrentamientos entre los partidarios de Vulcano y los partidarios de la fallecida Lilandra, el actual Majestor se dirigía en rumbo de intercepción de la Bomba T, a bordo de la cual viajaba Rayo Negro en una misión suicida, ya que la bomba solo funcionaría con su poder y si se encontraba allí en el momento de la explosión, moriría. En su furia, Vulcano adelantó a su flota y llegó hasta la Bomba T, entrando en la nave y enfrentándose a Rayo Negro en combate personal. Ambos lucharon con todas sus fuerzas hasta que pareció que Rayo Negro lograba matar al Majestor. Entonces llegó Cristal con el teleportador Mandíbulas, que usó su poder para inhabilitar la Bomba T de modo que no pudiera inundar con las Nieblas Terrigenas todo el cosmos. Cristal logró convencer a su cuñado que ahora, con la muerte de Vulcano, existía otra manera de hacer las cosas. Los tres, Cristal, Mandíbulas y Rayo Negro se dispusieron a abandonar la nave ya que pese a que habían inhabilitado la capacidad de la bomba de provocar mutaciones, todavía era capaz de provocar una explosión de condiciones cataclísmicas. Sin embargo, en el instante en que iba a producirse la teleportación, Vulcano, que lógicamente no había muerto, se lanzó contra Rayo Negro evitando que se marchara, ambos se enzarzaron en una pelea mortal que se vio interrumpida cuando la Bomba T hizo explosión acabando con la vida de Vulcano y Rayo Negro. La enorme explosión no solo acabó con la vida de ambos reyes, sino que la onda expansiva destruyó cerca del noventa por ciento de la flota Shi'ar. Pese a la muerte de ambos monarcas, la guerra distaba mucho de haberse solucionado.

En los Territorios Cedidos, las tropas del antiguo lugarteniente mantenían a raya a las fuerzas Shi'ar pese a que estos contaban con la ayuda de las fuerzas de Blastaar, fue por ello que Vulcano (lógicamente antes de morir) envió allí a su Nueva Guardia Imperial para asesinar a Voraz. Xenith se enfrentó a Voraz al que derrotó con facilidad, pero cuando se disponía a asesinarlo, el menor de los Rider llegó y usó su poder gravimétrico para contener a la Strontiana. Sin embargo el poder de Xenith era demasiado para el joven que hubiera muerto de no aparecer su hermano acompañado de dos de sus compañeros del Cuerpo Nova. Los tres se enfrentaron a la Nueva Guardia Imperial a la que lograron derrotar, siendo Xenith derrotada por Nova que los puso bajo custodia para su posterior juicio por crímenes de guerra.

En el espacio, el almirante Ka'ardum se veía obligado a rendir las fuerzas Shi'ar y a pedir negociaciones para firmarla paz. Los Kree, ahora bajo el mandato de Medusa como nueva reina de los Inhumanos, aceptaron detener las hostilidades.

En Chandilar, nadie podía detener el caos, las explosiones se multiplican por doquier y nadie parecía ser capaz de detener la matanza, ni los hombres X, ni los Saqueadores Estelares... Sin embargo, una persona si fue capaz de devolver el orden a la ciudad trono, se trataba de Gladiador, él había acabado en un estado de furia con el Canciller Araki y sus Comandos de la Muerte, pero ahora comprendía que su pueblo estaba sufriendo. Estaba decidido a ayudarles y la casualidad quiso que, de entre las ruinas, cogiera el cetro imperial. Cuando la gente vio a Gladiador con el cetro imperial, y sabiendo de su abnegación y dedicación al pueblo Shi'ar, comenzaron a aclamarlo como Majestor. Pese a que Kallark no tenía ninguna ambición de convertirse en el nuevo monarca de los Shi'ar, comprendió que esa era la mejor manera de devolver el orden en Chandilar y aceptó. Ayudado por los Saqueadores Estelares, el nuevo Majestor creo una zona segura en la ciudad, pero por todo el imperio se sucedían los levantamientos y las rebeliones. Gladiador sabía que solo la proclamación de un nuevo Majestor pondría fin a la guerra civil y esto debían hacerlo los Kree, como legítimos ganadores de la guerra de reyes.

Los Inhumanos llegaron a Chandilar dispuestos a ejercer como gobernantes, Cristal había sido la elegida para gobernar a los Shi'ar pese a que esta prefería seguir con su labor de atender a los Kree mas desfavorecidos. A su llegada a Chandilar, los Inhumanos presidieron el funeral en honor de Lilandra, sin embargo entonces se produjo un levantamiento orquestado por la Guardia Imperial que no aceptaban la muerte de Vulcano ni la rendición ante los Kree y pretendían crear un gobierno interino presidido por la Guardia Imperial al tiempo que pretendían seguir la guerra. Los Inhumanos se enfrentaron a la rebelde Guardia Imperial pero el combate fue detenido por Gladiador, que impuso a sus antiguos compañeros el fin de los hostilidades y la rendición inmediata. Cristal entonces le entregó el cetro imperial a Kallark, ya que él era el único que podía gobernar a los Shi'ar como regente bajo el dominio de los Kree, de manera reticente y por el bien de su pueblo, Gladiador aceptó. La Guerra de Reyes había terminado, los Kree habían vencido y ahora el Imperio Shi'ar mantenía cierta independencia pero bajo el dominio de los Kree. Ambos reyes habían muerto y ahora los Kree estaban regidos por Medusa y los Shi'ar por Gladiador. Ambos imperios tenían que hacer frente a un peligro mayor que el que nunca habían conocido, ya que, como los Guardianes de la Galaxia habían previsto, la explosión de la Bomba T había provocado una ruptura en el tejido de la realidad creando una falla dimensional de años luz de anchura, a través de la cual decenas de criaturas intentaban abandonar su Universo para invadir este. Ahora ambos imperios debían dejar de lado sus diferencias para hacer frente a un enemigo común y solo la unión de ambas razas les permitiría prevalecer.