Carolyne Sheridan

Carolyne Sheridan trabajaba como genetista en el laboratorio de Anderson Bio-Technic, una empresa de biotecnología afincada en Nueva York {N 6}. A inicios de los ochenta, su equipo de trabajo corría peligro de quedarse sin fondos si no obtenían resultados en su investigación para crear vida, así que Carolyne y su compañero Jerry Baker decidieron usar sus propias células para falsear los resultados de su investigación y así ganar más tiempo {N 8-FB}. Sin embargo, no contaron con que el Doctor Anderson decidiera hacer público el supuesto descubrimiento de sus empleados. Sabiendo que la criatura que habían creado no pasaría el escrutinio de la comunidad científica, decidieron simular un asalto de un fanático a las instalaciones y arrojaron las muestras por el retrete. Para hacer la situación más creíble, Sheridan se dañó la cara con ácido y Baker mató de un disparo a la cabeza al yonquie que habían contratado para simular su suicidio {N 8-FB}.

Diez años más tarde, la criatura que habían arrojado al retrete regresó convertida en Sluj, un ser gigantesco hecho de residuos orgánicos. Cuando las noticias difundieron la aparición de la criatura, rápidamente Sheridan la reconoció como el ser que habían creado. La mujer instó a sus compañeros Baker y Wenstein a tomar cartas en el asunto. De esta forma, crearon un compuesto capaz de destruir a la criatura. Con él se presentaron ante las autoridades, quienes no dieron crédito a su historia. Sin embargo, Namor, que estaba haciendo frente al ser, la creyó y usó el compuesto para destruir a Sluj. Debido al gran tamaño de la criatura, el ser tardó en morir. Baker quiso escapar de allí, pero Sheridan no le dejó. En su agonía final, la criatura reconoció a Sheridan como su madre y su cuerpo se descompuso. Tanto ella como Baker murieron ahogados por el lodo que componía el cuerpo de Sluj {N 7}.