Young X-Men

Vendas se despierta por una pesadilla premonitoria que tiene en la que sueña que pelean contra Donald Pierce y uno de ellos pierde la vida. La chica decide vestirse y salir para avisar a sus amigos.

Cachorro ha rastreado a Maximus Lobo hasta Alemania. El mutante ha perdido sus poderes después del Día M y Cachorro quiere vengarse por lo que le hizo sufrir cuando estaba en el Instituto Xavier. Pero antes de que pueda hacer algo de lo que podría arrepentirse más tarde aparece Cíclope y lo detiene proponiéndole enfocar su ira hacia objetivos más apropiados.

Un grupo de talibanes llega hasta el pequeño pueblo de Bakwa para someterlo a su influencia, pero una voz les advierte que se marchen ya que el pueblo está bajo su protección. Como el grupo de talibanes se resiste, se levanta una nube de polvo que arranca la carne del brazo de uno de ellos. Asustados, regresan a sus vehículos blindados y se marchan. Un policía agradece a Arena su intervención y le dice que estarán ya listos cuando regresen de nuevo. La chica planea irse a Zabul, pero aparece Cíclope para llevarla de regreso a los Estados Unidos.

Ruth viaja hasta las ruinas destruidas de la Mansión-X, en ellas esperaba encontrar a alguien a quien poder advertir de la visión que ha tenido, pero la encuentra totalmente desierta y decide marcharse. O eso cree, porque una figura la mira entre las sombras.

Erik Gitter se está realizando un nuevo tatuaje en la mano cuando entran dos policías en el negocio de tatuajes y le dicen que van a arrestarlo por haber molestado a una mujer. El chico toca al agente que le está leyendo los derechos con su nuevo tatuaje (una marca de peligro biológico en la palma de su mano) y éste se pone a vomitar descontroladamente. El otro policía golpea a Eric por la espalda y lo arresta.

Mientras está en el calabozo encerrado, un policía se acerca y abre la celda. De pronto cambia su aspecto y se convierte en Cíclope y le pide que lo acompañe a Westchester.

Ruth se encuentra con Santo en un bar de Naples y le cuenta su sueño. El chico está emocionado porque va a formar parte de un nuevo grupo de hombres-X y no parece darle importancia al hecho de que uno de ellos pueda morir. Cíclope se presenta en la mesa y les dice que hace 15 minutos que los está observando y que podría ser cualquier enemigo. Santo le responde que no le preocupa ya que es indestructible a lo que Cíclope responde disparándole y lanzándolo a través de la ventana. En la calle cuando Santo se levanta Cíclope le ofrece unirse al nuevo grupo, pero Santo solo acepta si también recluta a Vendas.

Cíclope ha reunido a los jóvenes mutantes en la Cueva del Peligro. Allí les dice que viven tiempos difíciles en los que van a tener que hacer frente a otros mutantes. En concreto a la nueva formación de la Hermandad de Mutantes Diabólicos dirigida por el Club Fuego Infernal y les proyecta un holograma de los Nuevos Mutantes originales.