Drake

Drake nació en Los Ángeles en 1947, hija de un soldado de color gran conocedor de las artes marciales japonesas. Fue durante la Segunda Guerra Mundial que su padre aprendió las disciplinas marciales en su estancia en Japón. Como si fuese algo innato en su familia, James, el hermano mayor, aprendió de su padre y Drake de su hermano. Sintiendo la necesidad de seguir perfeccionándose, en 1953 la familia regresó a Japón donde entró en contacto con La Casta, un grupo selecto de guerreros de los que formaba parte Stick. Si bien James fue admitido como nueva adepto de La Casta, los prejuicios hicieron que Drake fuera ignorada completamente y se quedara con la secta guerrera como sirviente. Sin embargo, durante tres años James se encargó de enseñarle lo que iba aprendiendo. Le pasaba fragmentos de textos o la despertaba en mitad de la noche para practicar en silencio en el patio del recinto de La Casta. Sus actividades no pasaron largo tiempo desapercibidas y Stick, acusando a James de haber roto las reglas de La Casta retó a los hermanos a enfrentarse contra varios miembros del grupo, el último en permanecer de pie se quedaría con ellos y seguiría en entrenamiento. Así fue como Drake demostró que era mejor que su hermano y salió victoriosa del enfrentamiento.

La ira alimentada en su interior por los años de rechazo sufridos por su padre, por los miembros de La Casta y por el mundo que la rodeaba por haber sido una niña negra, explotaron convirtiéndose en una guerrera peligrosa. Así fue como al cabo de dos años mató por primera vez. Ocurrió durante un entrenamiento en el que terminó por accidente con la vida de un miembro de La Casta. Por ello fue expulsada y, La Mano, el grupo ninja antagonista de La Casta, la reclutó inmediatamente. Si bien Drake pensó que podría infringirles daño y por ello Stick la perdonaría y podría regresar a La Casta, La Mano le tendió una trampa haciéndole matar a su propio hermano en la prueba de ingreso. Al haber caído tan bajo resultó una presa ideal para los ninjas, que la transformaron en una asesina despiadada. Sin embargo, cuando a principios de 1972 La Mano y La Casta se enfrentaron en Luxemburgo Drake mató a cuatro miembros de La Casta, entre los que se encontraba su propio padre. El shock la hizo reaccionar y abandonó el grupo de asesinos trasladándose a Los Ángeles. Allí logró encontrar la paz interior y se convirtió en profesora de artes marciales {ELEK2 19}.

Philip Carson era un mercenario que trabajaba para Jeremy Locke, uno de los miembros de La Coalición, un grupo de víctimas de las muertes causadas por Elektra. Gran amigo de Drake, Carson le presentó a Elektra cuando Locke se enzarzó en una cruzada para salvar el alma de la asesina a sueldo. Drake enseñó a Elektra humildad, ya que su paz interior la hacía claramente superior a la asesina. Gracias a sus entrenamientos, Elektra aprendió a conocer su lado humano y la compasión {ELEK2 17~ 19}.

La Mano, que deseaba volver a recuperar a Elektra como su asesina predilecta, envió a tres de sus mejores hombres (Pensamiento, Sombra y Dolor) tras ella. Siguiendo su rastro hasta el dojo de Drake atacaron el establecimiento con un fuerte contingente de ninjas. Maestra y alumna se enfrentaron a La Mano y, aunque superadas en número, pudieron hacer frente a los ninjas y obligarlos a retirarse, durante la lucha Drake fue alcanzada por un dardo envenenado. Mortalmente herida, Drake murió en los brazos de Elektra {ELEK2 20}.