Wilbur Wycombe

El Senador Wilbur Wycombe fue el encargado de dirigir el interrogatorio al que fue sometido el General Selbert en la Casa Blanca. Wycombe sabía que el General estaba involucrado en algo llamado Proyecto: Glamour que tenía como finalidad la creación de supersoldados. Toda la operación era clandestina y aunque admitió conocer las actividades dudosas de las que Wycombe le acusó, como el envío de dinero desde cuentas suizas a Colombia, la relación con el Instituto para el Estudio de las Ciencias de la Liberta, el General Selbert se las ingenió para dar explicaciones plausibles. Sin embargo, negó cualquier vinculación con el Proyecto: Glamour. Las preguntas del Senador inquietaron a Jody Choate, otro miembro del Proyecto: Glamour, que mandó matarlo. En efecto, esa misma noche mientras Wycombe hablaba por teléfono con el periodista Mickey Ditillio sobre sus sospechas fue secuestrado por un grupo de cultistas satánicos con lazos con el Proyecto {M/CP 2/2}.

Entregado a Zahner, el hombre lo trasladó hasta el Instituto para el Estudio de las Ciencias de la Libertad para librarse de él convirtiéndolo en el nuevo cobaya de la investigación para recrear la fórmula del supersoldado diseñada por Ted Sallis. El Doctor Railback ordenó a la enfermera Goren que iniciara el proceso. Tras inyectarle la nueva fórmula, Wycombe no tardó en mutar {M/CP 3/2}.

Su cuerpo empezó a volverse inestable y los tejidos de su cuerpo crecieron sin control. Wycombe entre gritos de agónicos dolor pidió ayuda y la enfermera Goren se acercó para intentar calmarlo, pero un apéndice descontrolado emergió de su cuerpo atravesando el cráneo y la enfermera y tanto Wycombe como la mujer estallaron en un amasijo informe de tejidos orgánicos {M/CP 4/2}.

Los restos de Wycombe fueron usados más tarde por el Doctor McDonald para proseguir con la investigación {M/CP 5/2}.