Suspiria

Nacida en Sicilia, poco se sabe de la vida de Suspiria antes de que se convirtiera en una asesina casi mítica al servicio de la Cosa Nostra (la Mafia), a la que muchos consideraban una leyenda urbana fabricada por criminales profesionales más que como una persona real. Años atrás, cuando la Camorra Siciliana trató de apoderarse de los negocios vitícolas de uno de sus rivales (la Familia Napolitano), el clan Napolitano contrató los servicios de Suspiria para que eliminara a los jefes de la Camorra, reafirmando de esta manera el dominio de la Familia Napolitano en la región. El clan Napolitano mantendría a Suspiria como asesina tras dicho trabajo, pero esta limitaría sus actuaciones en años más recientes debido al hecho de que dio a luz una hija. Mientras se hallaba disfrutando de unas vacaciones en familia en la Riviera Francesa, el marido de Suspiria fue asesinado y su hija raptada por Vincent Carraciola, un traficante de armas italiano que quería chantajear a Suspiria con la intención de que trabajara para él. Con el destino de su hija en manos de Carraciola, Suspiria volvería a su villa en Taormina, Sicilia, donde cumpliría con los encargos de Carraciola con la ayuda de su equipo de apoyo, que incluía entre otras a Karen y Cyber.

Mientras tanto en los Estados Unidos, diversos miembros de la rama americana de la Familia Napolitano, incluyendo a Albert Napolitano, fueron asesinados por el Castigador en Nochebuena mientras atracaban una joyería de Tiffany's & Co. de la Quinta Avenida de Nueva York. La viuda de Albert, Regina Napolitano, que tuvo que enterrar entonces al tercero de sus maridos asesinado por dicho vigilante decidió entonces convencer al resto de las viudas de los Napolitano para reunir 2,5 millones de dólares con los que poder encomendar el asesinato de Castle a Suspiria. Aunque Carraciola no le permitió dejar Italia, Suspiria llegaría al Aeropuerto Kennedy de Nueva York 48 horas más tarde y, el día de Nochevieja en Times Square comenzó a asesinar metódicamente a los que se hallaban de celebración para hacer que el Castigador se mostrara. Tras asesinar a una de las socias de Suspiria disfrazada para hacerse pasar por ella, Suspiria lo rastrearía y acorralaría en su apartamento. Tras una brutal pelea entre los dos, Suspiria revelaría la identidad de aquellos que la habían contratado habiendo obligado al Castigador a besarla. A continuación, el Castigador lanzaría a Suspiria desde un tejado y acabaría con la vida de Regina Napolitano.

Sorprendentemente Suspiria sobreviviría a la caída y tras someterse a nueve meses de rehabilitación pudo volver a andar. Durante el año que Suspiria se hallaba recuperándose en América, Carraciola se volvió paranoico y llegó a creer que esta había sido contratada por un traficante de armas rival. Tras su recuperación, Suspiria sería secretamente contratada por un senador de los Estados Unidos para que liberara a su hijo secuestrado, cuyo secuestro había sido organizada por Carraciola y un gangster/pedófilo internacional llamado Herman "el Alemán" Zeufriedan con la intención de que ello sirviera de distracción para que pudieran introducir un cargamento de armas en Nueva York. Mientras se hallaba investigando el origen de estas armas ilegales, el Castigador acompañaría a regañadientes a Suspiria a Italia, localizando y acabando con la vida de Carraciola en el Hotel Palazzo de Roma antes de rescatar al hijo del senador (y a otro chico secuestrado) de las garras de Zeufriedan que se hallaba en un avión a punto de despegar del Aeropuerto Internacional de Villanova d'Abenga. Antes de acabar con Zeufriedan, Suspiria averiguaría que su hija había sido vendida a una familia en Hamburgo e inmediatamente fue en su busca. Sus pasados crímenes le fueron personados por el gobierno italiano a cambio de sus servicios como agente del mismo {PUN:BV 1}.