Avengers vol 4

Robbins está encerrado en la Prisión de Máxima Seguridad de la Isla Ryker donde tiene como guardia a O'Brien. Robbins intenta comprarlo con dinero pero no lo consigue. Debido a la gran actividad de los Vengadores y a que Robbins no tiene superpoderes han decidido trasladarlo a una prisión convencional para dejar su celda libre para nuevos reclusos. Una semana más tarde, Robbins ya está en la prisión donde tiene como guardaespaldas al recluso 7726371. En prisión descubre la existencia de un hombre solitario al que todos temen y que Robbins toma por un mutante. Robbins se toma su tiempo para ganarse la confianza de Ertzia, quien finalmente le confiesa que trabajaba para Rayo Negro ocultándole cosas. Una noche uno de los guardias se acerca a su celda y le pregunta si hablaba en serio a cerca de fugarse. El guardia quiere saber si le van a pagar lo suficiente y Robbins cubre el dinero que el otro quiera.

Steve está furioso con Tony por haber descubierto a sus espaldas que se reunía con los proclamados Illuminati. Al quedar expuestos no tienen más remedio que contar a los Vengadores el peligro que corren las Gemas del Infinito. Hulk Rojo propone usar las restantes gemas para contrarrestar el poder que tienen las dos que ya han sido robadas. Aunque Spiderman opina que no deberían hacerlo, Steve no descarta la posibilidad y dice que las emplearan si llega a surgir la necesidad. Pero Steve no está dispuesto a dejar marchar tan fácilmente a Tony, por suerte Thor intercede entre los dos. Hulk Rojo se dirige hacia los Illuminati y les pregunta donde se encuentran el resto de gemas, todos ellos se miran entre sí.

El Encapuchado entra en el apartamento donde se encuentra Madame Máscara. Para demostrar el poder que ha conseguido rehace la cara de la mujer y le dice que ha conseguido recuperar el poder y que las gemas le dicen lo que tiene que hacer.